La avería que dejó sin internet a diez pueblos fue provocada por el robo de dos cables de fibra óptica

Misterio resuelto. La “incidencia masiva” que dejó sin internet el jueves a una decena de pueblos de la comarca de La Bañeza se debió al robo de los cables en un tramo de la línea de fibra óptica que discurre paralela a la Nacional VI, a la altura de San Martín de Torres, muy cerca del acceso a la autovía A-6.

Según pudo saber este periódico, los autores del robo buscaban cables de cobre, aún presentes en algunos tramos del tendido entre La Bañeza y San Martín. Sin embargo, confundieron todos los cables con cobre y cortaron también dos troncales de fibra óptica de 128 fibras, que comparten la misma línea de postes. 

El corte, registrado exactamente a las 18:38 horas del jueves, dejó sin servicio a San Martín y San Juan de Torres; Cebrones del Río; Roperuelos, Moscas y Valcabado del Páramo; Pozuelo del Páramo, Quintana del Marco, San Adrián del Valle y Alija del Infantado.

Cuando los técnicos de Telefónica llegaron al lugar, encontraron los cables completamente “pelados” y priorizaron la recuperación del servicio en viviendas y empresas. La operación fue especialmente compleja, según fuentes oficiales de la compañía, porque los cortes estaban en lo alto de un poste, lo que obligó a instalar más de cien metros de cable nuevo para poder empalmar y restablecer progresivamente la conexión.

A lo largo de la noche se realizaron varios empalmes provisionales, aunque las tareas en altura no pudieron reanudarse, por seguridad, hasta la mañana siguiente. Algunos municipios recuperaron internet de madrugada: los últimos fueron Alija, Pozuelo y San Adrián, que volvieron a la normalidad a las 17:13 horas del viernes.

Pese a ello, los técnicos continuaron trabajando toda la tarde para fusionar definitivamente el cable cortado y recolocarlo en los postes, ya con la tranquilidad de haber reestablecido el servicio provisionalmente a todos los pueblos afectados.

Una “chapuza”

Los robos de cable son frecuentes tanto en esta zona como en otros puntos de España. Vecinos consultados explican que no es la primera vez que este tramo en concreto sufre sustracciones, facilitadas por la cercanía de la autovía, que permite “escapar a toda velocidad”. Aun así, este robo ha sido considerado una “auténtica chapuza”, ya que las bandas organizadas que se dedican al cobre suelen actuar en puntos muy concretos y “desde luego no confunden un cable de fibra óptica con uno de cobre”.

Ya a primera hora de la tarde del viernes, Telefónica informaba de que la causa había sido “un corte ajeno a la compañía (accidente o similar)” y aseguró haber trabajado “con la máxima celeridad”, extremo que confirmaron los técnicos desplazados. “Entendemos que para nuestros clientes es mucho tiempo sin línea, pero era un trabajo muy complicado”, señalaron, destacando además que el corte se produjo cuando quedaban “muy pocas horas de luz”.

Este periódico intentó contactar con los servicios de prensa de la Guardia Civil para averiguar si se conocía la identidad de los autores o se estaba investigando el suceso, sin obtener respuesta hasta el momento.

Colaboración vecinal

Desde el primer momento del corte, numerosos vecinos contactaron con este medio por teléfono y por WhatsApp para informar del estado de la fibra óptica en sus localidades, ya que oficialmente apenas se podía obtener información más allá de la que daban los operadores.

Gracias a esa colaboración, este periódico pudo informar a más de 32.000 personas a través de su canal de WhatsApp, que se ha consolidado como una herramienta de comunicación capaz de llegar, en situaciones como esta, a donde no alcanzan otros medios tradicionales.

Por ello, queremos expresar nuestro agradecimiento a las más de cuarenta personas que se pusieron en contacto con nosotros, tanto de la provincia de León como de la de Zamora —que no resultó afectada por el corte—, incluidos varios alcaldes y secretarios municipales de la zona.