El programa de Telecinco Fiesta se puso en contacto con la responsable de este medio digital, Carla Vidal, el pasado viernes. El supuesto objetivo era realizarle una entrevista en directo como afectada por la ola de incendios que arrasa nuestros pueblos. A modo de spoiler: la entrevista nunca se realizó.
Movidos por el mismo espíritu colaborativo con el que alimentamos nuestro canal de WhatsApp –con más de 30.000 suscriptores y un alcance de 138.000 cuentas–, y que se ha convertido sin buscarlo en la principal vía de información para miles de vecinos, compartimos de buena fe varios contactos con la redacción del programa. Creímos en la promesa de dar voz a los afectados. Pero Telecinco se limitó a aprovechar nuestra generosidad para hacerse con testimonios, relegándonos después al olvido.
Facilitamos, por ejemplo, el contacto de la familia de Castrocalbón que perdió su casa –con cuya entrevista abrieron el programa–, así como el de varios alcaldes que, más precavidos que nosotros, no “picaron”.
Aun así, seguimos el proceso que nos marcaron: a las 9:12 horas del sábado recibimos un cuestionario para responder en audios que “irían a guion”, seguido de más instrucciones durante más de una hora. Dos personas distintas de la cadena contactaron para cerrar detalles. Por la tarde, a las 17:30, hicimos pruebas de sonido e imagen y quedamos a la espera, conectados.
Mientras tanto, anunciamos en nuestro canal la inminente entrevista, noticia que rápidamente se compartió en WhatsApp, Facebook y hasta de viva voz con mayores sin acceso a internet. Pero, llegada la hora, lo que vimos fue un rosario de reportajes sobre las novias de Froilán, la Familia Real o la casa de Ana Obregón. Finalmente, a las 19:40, nos llamaron para decir que “no había tiempo”, porque después tocaba “lo de Terelu”: un reportaje sobre los diez años de la muerte de Lina Morgan. Prometieron volver a llamar otro día, pero esta vez fuimos nosotros quienes lo rechazamos. Como bien le respondió Carla al coordinador: los afectados no importamos nada, bastante menos que las frivolidades del corazón y las discusiones entre Frigenti y Macoke y su decimoséptimo "novio".
Queremos pediros disculpas por haberos tenido pendientes de ese “canal” y daros las gracias por los cientos de mensajes de apoyo recibidos –sí, cientos– tras esta decepción.
Nota: disponemos de capturas de pantalla de todos los contactos compartidos y todas las conversaciones.
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