Altobar de la Encomienda vive hoy uno de los días más alegres de su historia. Su alcalde, Hugo Pisabarro, asegura que es la primera vez que cae El Gordo en su pueblo, “al menos que yo recuerde, aunque soy muy joven”, dice, entre risas, mientras salpica de cava a todos los clientes.
Porque Miguel, en el Bar El Rincón, no para de descorchar botellas desde que apareció Jéssica, la joven afortunada que se ha llevado 400.000 euros (330.000 ya con impuestos) gracias a un décimo que compró en el campo de fútbol.
“Estaba trabajando y me dijo un compañero que había tocado en La Bañeza, y pensé que bueno, que sería en cualquier parte...”, nos cuenta la afortunada. “Entonces –continúa– me dice que fue en La Llanera, y me puse muy nerviosa, porque sabía que tenía un décimo... Pero esperé a llegar a casa y le pregunté a mi padre y ya me respondió que me había tocado. ¡Dice mi abuela que pegó un salto que casi llega al techo!”, explica entre risas.
A pesar del dineral que se lleva, tiene muy claro que no va a dejar su trabajo en el matadero de La Bañeza. Ante todo, prudencia. Aunque hoy sí hay barra libre para todos los amigos y demás clientes del bar, que invita la nueva millonaria de Altobar.
Jessica es “del pueblo de toda la vida”, como nos cuenta Hugo, que además de ser alcalde, es su amigo de siempre. Bromean sobre que ahora ya no hay ningún impedimento para que tengan un hijo: “Justo ayer me decía Hugo que no podíamos porque lo fundíamos todo, ja, ja, ja, y ahora ya podemos!”, dice entre risas, a lo que su amigo contesta con un “Pegamos bien, ¿verdad?”.
Jéssica no fue la única de Altobar en resultar agraciada con el Gordo. Y es que Daniel Cuervo Cubero, aunque es de La Bañeza, tiene familia por parte materna en el pueblo, y ha repartido décimos con muchos de ellos.
“Estaba en el dentista, en la sala de espera, y escuché en la tele que había salido el Gordo, pero lo que menos pensé es que fuera a mí”, recuerda. Luego, cuando entró en el grupo de Whatsapp del equipo ya se dio cuenta de que era verdad.
Este lunes lo estuvo celebrando a lo grande con sus compañeros, bromeando sobre posibles fichajes. “¡Nos daba hasta para Lamine Yamal!”, bromea, totalmente feliz.
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