Las trabas burocráticas a un proyecto bloquean los 240.000 euros del PIOS para La Antigua

El Ayuntamiento aprobó el Presupuesto de 2026, de 246.338 euros, sin poder incluir estas obras, al no tener aún el visto bueno provincial
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El objeto de las múltiples modificaciones son unos baños para el frontón de Audanzas / Foto: cedida 

Aunque cuando la Diputación de León aprobó el Plan de Infraestructuras, Obras y Servicios (PIOS) de 2025 al Ayuntamiento de La Antigua le correspondieron 240.000 euros, esta cantidad no ha podido consignarse en el Presupuesto de 2026 aprobado ayer, debido a que el proyecto continúa sin aprobarse desde la Diputación.

Según explicó el alcalde, Javier Alonso, el problema está en unas obras en las instalaciones del frontón de Audanzas del Valle, que el Ayuntamiento quiere dotar de una zona de vestuarios y aseos, y que una y otra vez le mandan modificar desde el organismo provincial. “Es la razón por la que tantos ayuntamientos van a pavimentación, porque en cuanto te sales un poco del arreglo de calles, te lo tiran abajo por burocracia”, asegura.

Lo que más lamenta es que, en el mismo paquete que esta obra, van las del resto de pueblos, porque él tiene clara su filosofía desde que llegó a la Alcaldía: que el dinero de las subvenciones se reparta “de forma equitativa” entre las cinco localidades. Así, pendientes del PIOS está una canalización en La Antigua, el asfaltado de una calle en Cazanuecos, el acondicionamiento y renovación de la plaza de Grajal de Ribera, y pavimentación en Ribera de la Polvorosa.

Esto hace que el Presupuesto aprobado ayer se limite prácticamente a los gastos e ingresos ordinarios, al no poder incluir subvenciones preconcedidas pero aún no aprobadas. No obstante, en los 246.338 euros que gestionará en 2026 este Ayuntamiento, sí se contemplan algo más de treinta mil euros, en previsión de algunas mejoras necesarias en infraestructuras y equipamiento municipal.

Por otra parte, las cuentas de 2026 mantienen las ayudas a los escolares empadronados en los pueblos de este ayuntamiento. Además, se reserva una partida para promover la cultura y tradiciones en las cinco localidades.

 

Comida de confraternidad

En otro orden de cosas, tras finalizar el pleno, el Ayuntamiento organizó una comida de confraternidad a la que asistieron tanto los representantes políticos como los trabajadores, “para fomentar la unidad”, en palabras del regidor.

Los siete concejales, junto a los trabajadores –tanto los fijos como los temporales– disfrutaron de una comida en la bodega La Gruta, de Pobladura del Valle, para celebrar la próxima llegada de la Navidad y despedir el año. “No todo va a ser trabajar”, subrayó Alonso.

 

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