BELENES

El Belén de Sardo Colinas: una ventana a la Navidad en Alija del Infantado

El Nacimiento de este año reproduce la calle del Cristo y las Escuelas de arriba
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Imagen editada
Sardo Colinas nos muestra el Belén desde dentro de su casa

 

En Alija del Infantado todo el mundo conoce a Sardo Colinas porque, poco a poco, ha ido reproduciendo el pueblo entero en maqueta, con una precisión sorprendente. Y más sorprendente resulta aún porque, debido a una enfermedad que padece en los ojos, apenas le queda un 0,05% de visión. 

Sin embargo, hoy no venimos a hablar de su increíble maqueta del pueblo, que alcanza ya los 180 metros cuadrados, sino de cómo lleva ya diez años aprovechando las últimas casas realizadas –porque sigue ampliando– para montar un precioso Belén en la ventana de su casa, para que todas las personas que pasen por delante puedan admirarlo.

Cuando se acercan las fechas navideñas, de hecho, son muchos los vecinos que se preguntan, con intriga, a qué barrio le tocará este año ser escenario del Nacimiento del Niño Jesús. La incógnita quedó despejada la víspera de Nochebuena, cuando las persianas de la casa de Sardo, en la calle Real, se levantaron para mostrar en todo su esplendor, la calle del Cristo y las Escuelas del barrio de arriba.

Excepto el portal de Belén, el Castillo de Herodes, los molinos y la posada Gemma (llamada así como homenaje a su mujer), que repiten todos los años, el resto son siempre edificios nuevos: reproducciones fidedignas de las casas de Alija del Infantado, que trabaja con minuciosidad, a partir de las fotografías que toma su mujer –convertida en su ayudante–, ampliándolas con el zoom hasta poder apreciar todos los detalles. "Este año toca esa zona porque son las últimas casas que he estado haciendo. Antes de montarlas en la maqueta, las coloco en el Belén", nos explica.

Por si quedaran dudas, cada casa lleva un cartelito que permite a los familiares identificar el inmueble: Polinar, Fausto, Lina...

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Detalle de algunas de las casas del pueblo, con los nombres de sus propietarios

Sardo nos comenta que, además, la decoración de las calles de este particular Belén también trata de que sean objetos tradicionales de este rincón de León, como los carros, los trillos, los puestos del mercado de otros tiempos.

El Belén ha ido creciendo año tras año. "Cuando empecé los montaba en la tabla de planchar. Luego lo amplié a la mesa del salón, pero también se me quedó pequeña, así que ahora lo hago en este espacio, de 7 metros cuadrados", comenta.

En cuanto al material del que están hechas las casas, trabaja principalmente en contrachapado okume de 3 mm, y también con caña de río para los tejados. Sin duda, un trabajo admirable y de lo más original que puede ser visto todos los días, hasta Reyes, en la ventana de su casa, en la calle Real de Alija del Infantado, hasta las 23.00 horas, en que se apagan las luces.

 

 

 

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